A juicio el ginecólogo acusado de pederastia

El ginecólogo del hospital Central acusado de abusar de un menor y de distribuir pornografía infantil a través de la web quedó a un paso de enfrentar un juicio oral. En siete meses, el fiscal especial Santiago Garay terminó la investigación y acaba de elevar la causa a juicio. 

Finalmente, el médico que residía en el barrio Aeronáutico de Las Heras y que desde mayo de este año se encuentra detenido en la Penitenciaria Provincial, quedó imputado por dos causas. Una es por corrupción de menores y la otra por distribución de pornografía infantil en concurso real con abuso sexual agravado. 

Este último delito tiene una pena que va de cuatro a diez años y cuatro el cargo por la pornografía, por lo que el profesional de la salud podría llegar a pasar -siempre que sea encontrado culpable- más de 14 años en prisión.

La primera causa, en la que el fiscal investigaba inicialmente un abuso sexual, finalmente quedó relegada a corrupción de menores, pues la madre del menor implicado no quiso iniciar una acción penal por abuso sexual.

Santiago Garay es el fiscal especial encargado de investigar en nuestra provincia casos de pederastia y de distribución de pornografía por internet, formando parte de una red internacional de investigadores. 

En mayo pasado recibió datos desde Estados Unidos de que un usuario de Las Heras estaba enviando material pornográfico a otros consumidores. Con el IP del médico, rápidamente se logró encontrar su casa y luego se realizó un allanamiento. 

Archivos comprometedores

Allí se encontraron notebooks, celulares, computadoras, que fueron sometidos a una revisión exhaustiva por parte de los peritos de Delitos Tecnológicos. Fue durante ese análisis que descubrieron algo inesperado: además de archivos con fotos y videos de menores que eran sacados de la Red y distribuidos, encontraron un material que el  imputado había registrado de prácticas sexuales donde aparecía junto con un niño de tres años. 

El hallazgo desencadenó una investigación para determinar quién era la víctima de esas vejaciones, ya que no había dudas de que el agresor era el médico.

Finalmente, un familiar del profesional al que se le mostraron los archivos reconoció a los protagonistas: su hijo, que actualmente tiene 10 años, y el ginecólogo. 

La mujer afirmó sin dudar que la víctima era su hijo e identificó al único mayor que sale en las imágenes: dijo que era el ginecólogo investigado y que era familiar suyo.