La guardia del hospital como claro ejemplo de la deficiente salud pública
La quejas de los vecinos se multiplican cada día por el servicio de guardia que se presta en el hospital regional de Río Gallegos, donde las urgencias parecen no tomarse como tales y las atenciones parecen cada vez más a la ligera. Es un ejemplo más de todo lo que se debe mejorar en la cuestionada salud pública.
La salud pública sigue siendo constantemente cuestionada por los vecinos de cada una de las localidades de la provincia y en Río Gallegos son incontables las historias de quienes llegaron con problemas al hospital regional y no encontraron rápida solución.
Muchos saben que en muchos de esos casos la cuestión no tiene que ver directamente con los trabajadores, sino con decisiones políticas que permitan un mejor desarrollo de la tarea diaria, pero también es cierto que poco les importa eso a quienes sólo pretenden que se los atienda medianamente con inmediatez y con efectividad a la hora de llegar enfermos o padeciendo algún tipo de dolor al nosocomio.
Lo cierto es que muchas veces eso es justo lo que no sucede en el hospital y en la guardia del hospital, donde los trabajadores hacen lo que pueden, pero muchas veces no están ni cerca de lograrlo. Esto sin contar las interminables horas de espera que tienen que soportar quienes muchas veces llegan con urgencias que no pueden ser atendidas como tales.
Las últimas semanas parecen haber tenido incontables de esos casos en los que la guardia del hospital pocas soluciones aporta para los vecinos, quienes continuamente hacen llegar su reclamo el Diario Nuevo Día con la intención de que los funcionarios de turno, en este caso el ministro de Salud, Julio Visconti, tomen las medidas del caso, trabajando para mejorar un sistema de guardia que parece estar totalmente colapsado. (El Diario Nuevo Día)