Se extirpó el pene para poder tener todo su cuerpo tatuado

Adam Curlykale tenía el 90% de su cuerpo tatuado. El hombre tuvo cáncer de intestino grueso y el tratamiento de quimioterapia le provocó la desaparición parcial del pigmento de su piel, una afección más conocida como albinismo.

Deprimido por el aspecto de su piel, a los 20 años decidió comenzar a tatuarse con tinta negra.

“Los tatuajes me permitieron descubrirme nuevamente. Me convertí en bello”, aseguró Curlykale, quien a los 32 años tiene hasta los globos oculares llenos de tinta.

Pero, como sentía que sus genitales le arruinaban el arte del tattoo, se realizó una cirugía estética para quitarse todo. En el Hospital Jardínes en Guadalajara, en México, le practicaron la operación y le extirparon el pene, los pezones y los testículos.

Adam se autodenomina “Nullo”, que significa “nulificación genital”, y refiere a aquellas personas que no sienten necesidad de tener genitales y en su caso, además, quería llegar a tener el 99 ciento de su cuerpo tatuado.

Y aprovechando la ocasión, su novia y modelo trans Verónica Blades, se sometió a una operación estética para quitarse dos costillas. Horas después, publicó la foto en Instagram, con los huesos que le quitaron y al lado de Adam, ya que además, compartieron habitación.