Como Borocotó, Fernández y Paiva se pasaron al FpV a cambio de ingresar a familiares a la Legislatura
La información a la que tuvo acceso Nuevo Día es irrefutable: Los dos diputados oficialistas que esta semana se negaron a conformar el Bloque del PJ, no lo hicieron por una cuestión de principios ni dudas en cuanto al nuevo esquema, sino porque negociaron con el sector de La Cámpora.
En la jornada de ayer, el gobernador Daniel Peralta había sido consultado acerca del porqué de la ausencia de dos de sus diputados en el nuevo bloque impulsado por Alejandro Victoria. En la ocasión, el mandatario se ocupó de mostrar su mejor cara y decir que tanto Roberto Fernández como Martín Paiva “son de nuestro espacio”.
La suspicacia no era menor, ambos forman parte del grupo de diputados oficialistas e incluso Paiva es a quien el propio Peralta le encomendó ser la voz cantante de nada mas y nada menos que la derogación de la Ley de Lemas dentro de la Cámara.
El proyecto que Victoria pensó para poner fin a la virtual división del bloque del FpV y determinar un espacio propio para el oficialismo no tuvo hasta el momento una respuesta en términos mediáticos por parte de los camporistas, sin embargo, hacia adentro de la Legislatura resulta evidente que existieron cruces y negociaciones para frenar el intento que ayer pasó a Comisiones.
Cuatro fueron los diputados que sin titubear apoyaron la iniciativa: Selsa Hernández, Sebastián Gatti, Pedro Vinett y Martín Sotomayor, aunque Paiva y Fernández habría preferido no solo no adherir a la decisión de lograr independencia y pelear la distribución de cargos y lugares en las comisiones, sino que incluso aprovecharon la ocasión para transar entre gallos y media noche.
En contra de todo pronóstico, ambos lograron ingresar a dos familiares a cambio de permanecer en el FpV, familiares que, por cierto, ingresaron en lugar del personal que Rubén Contreras hizo echar semanas atrás y que, por cierto, se suman al hijo de este.
La lista, se completa además con una prima hermana del diputado nacional electo, Mauricio Gómez Bull.
Se sabe que la distribución de cargos políticos dentro de la Legislatura es cuestión de absoluto desmanejo, y que si bien no es un tema menor, en este caso Nuevo Día hace hincapié en lo sencillo que puede resultar borrar con el codo lo que se escribe con la misma mano ya que, insistimos, Fernández y Paiva eran hasta ayer dos diputados del ala peraltista.(El Diario Nuevo Día )