Canapino es uno de los 33 y largará en Indy500

“Esto es un sueño que se hizo realidad. Ahora quiero comprender todo lo que hicimos con el equipo, y hacer un intento más. Creo que podemos estar más arriba”, declaró Agustín Canapino al concluir la primera ronda de cuatro vueltas en la clasificación de la 107ª edición de las 500 millas de Indianapolis, en donde consiguió ubicarse 22º, con el flamante Dallara Chevrolet que le preparó  Juncos – Hollinger Racing.

El arrecifeño, debutante absoluto en Indy500, estableció un promedio de 231,320 millas por hora (372,273 Km/h), el cual pretende mejorar en la segunda ronda que tienen los pilotos: si renuncian al registro conseguido, se le anula el anterior, y si pretenden no arriesgar deberán esperar el último turno para salir a pista.

Alexander Rossi, con el Dallara Honda de Arrow McLaren estableció el mejor promedio, a 233,528 mph (375,827 Km/h.), superando al Dallara Honda del español Alex Palou y al Dallara Chevrolet de Rinus VeeKay.

UN ROCE CON EL PAREDÓN ABORTA EL SEGUNDO INTENTO DE CANAPINO

En la segunda ronda, Canapino intentó sostener el ritmo pero cuando recorría el tercer paso, y ante una ráfaga que afectó el andar de su auto rozó el muro y la suspensión trasera derecha acusó un daño, ante lo cual abortó su segundo intento por mejorar, retornando a boxes a fin que Ricardo Juncos y el resto del equipo evalúe el problema y repare para una nueva salida a pista. 

«Fue un susto importante. No esperaba que el auto se comportara de esta manera«, señaló el arrecifeño tras bajarse del Dallara Chevrolet, con el cual retrocedió un par de lugares en esa instancia, ocupando provisionalmente el 26º puesto, y manteniéndose entre los treinta que van integrando la grilla de manera directa.

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