Cambiarán alcohol decomisado por mercadería para comedores

Es el operativo más grande realizado”, confirmó el jefe de la Unidad Regional Trelew, Felipe González, sobre el secuestro de 5.014 litros de bebidas alcohólicas por venta clandestina. Eran cajones de cerveza, vinos, fernet y gaseosas, vendidos a un precio que quintuplicaba su valor comercial habitual. También había películas y cigarrillos.



Lo secuestrado se canjeará en alimentos para el Hogar de Niños, Ancianos y comedores. Recibirán la mercancía en unos 15 días, cuando se terminen los trámites.



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“Es un trabajo con Tránsito, Habilitaciones, Guardia Urbana, el Grupo Especial de Operaciones Policiales, Infantería y Canes. Comenzamos el operativo con una denuncia por peleas, orina en las veredas, ruidos molestos, etcétera. Hubo una vez hasta un homicidio de un joven también en la jurisdicción de la Seccional Segunda en el exterior de uno de estos lugares”.



El procedimiento se bautizó “Primavera Cero”. Fueron 6 órdenes de registro y allanamiento. “Agradecemos al juez de faltas y a la Oficina Judicial. Ingresar a un domicilio es complejo. Habilitaciones recibe los llamados, nos pasa y se chequean”. Los lugares eran jurisdicción de las comisarías Segunda y Tercera, en calles A. P. Bell, Davies y Nicaragua. Intervinieron vehículos del municipio y de la Unidad donde se deja en resguardo para un lugar acorde. “La oficina del segundo jefe está llena de cajones de bebidas secuestradas. El operativo más grande antes había sido de 3 mil litros”. El ministro de Gobierno, Federico Massoni, supervisó los operativos. Hubo una investigación previa con filmaciones y fotos.



Se intervino en comercios y viviendas particulares. “Los valores de venta de la bebida oscilan en $180 pesos la cerveza y 500 el fernet. Continúa esta gente más allá de los allanamientos. y mucha gente de Guardia Urbana. Se trabaja en bloque. Hay resistencia de la gente de abrir la puerta para ocultar la circunstancia”, manifestó.



El coordinador del área Inspecciones, Héctor López, explicó que “esto pasa primero por el juez de Faltas. Luego de labrar la infracción determina si el procedimiento está bien hecho y qué se debe realizar con la bebida incautada. Luego lo cambiamos por alimentos para entidades de bien público”.



Advirtió que en su mayoría los infractores “son reincidentes. Esto genera ganancia importante. Venden cerveza y otras bebidas al valor de los boliches de $180 a $500 pesos. Genera que el vecino reincida porque la ganancia es muy grande. Un comercio habilitado tiene posibilidad de cometer hasta tres infracciones. Luego es la clausura definitiva. Es difícil combatirlo pero recibimos denuncias constantemente por ruidos molestos, peleas y disturbios. Hay algún herido en distintos lugares donde se vende la mercadería ilegal”.



Las denuncias por este tema son diarias. “Son anónimos, de vecinos cansados de lidiar con quienes compran fuera de horario. Cuando llega la denuncia vamos pero ahora pedimos la colaboración para evitar problemas con el comerciante”.



“La oficial Saiegg -reveló el funcionario municipal- realiza el trabajo, se toman pruebas fílmicas para la orden de allanamiento. Han agredido y les han pegado a los inspectores. Por eso se tomó la precaución de pedir colaboración de Policía y salvaguardar la integridad física de los inspectores”, concluyó.



“Dada la cantidad de bebidas, se buscará un comercio grande o bien se dividirá entre dos o tres comercios que estén en condiciones de realizar el canje”. (Diario Jornada)