Atención: Hacerse las uñas generaría cáncer

A partir de la creciente cantidad de casos de carcinomas de células escamosas y queratosis actínicas en el dorso de las manos, la Universidad de California realizo un estudio que sugiere que el uso frecuente de las lamparas utilizadas para el esmaltado con gel y las uñas acrílicas, conducen a la muerte celular y mutaciones que podrían causar cáncer de piel.

Para hacerse una idea del riesgo, los investigadores lo compararon con las camas bronceadoras que tienen un espectro de radiación ultravioleta que va desde los 280 a 400 nm. (nanómetros) y esta suficientemente demostrado son cancerígenas. Las cabinas de secado utilizan un espectro de 340 a 395 nm.

El auge del Nail Art a popularizado el uso de las cabinas de secado de luz UV, las personas que utilizan estos dispositivos lo hacen durante 10 o 20 minutos cada quince días, que es el tiempo de repintado o restauración que duran este tipo de esmaltes. El estudio publicado en Nature Communications estima que una sesión produce entre un 20% y un 30% de muerte del tejido celular.

La composición de los productos utilizados tanto para las "uñas en gel" como para las "uñas acrilicas" es similar. Se basan en una mezcla de monómeros y oligómeros acrílicos disueltos en disolventes orgánicos como alcanos o alquenos, pigmentos responsables del color, fotoiniciadores o iniciadores térmicos que regulan el endurecimiento (generalmente cetonas), y otros aditivos como por ejemplo antioxidantes.

El proceso de curado o endurecimiento consiste en lo siguiente. Los monómeros y oligómeros acrílicos son como pequeñas cadenas sueltas. Estas cadenitas tienen tendencia a enlazar entre sí formando una red (polímero reticulado). Cuanto más reticulada esté la red, más duro quedará el esmalte. Cuando las uñas se dejan secar al aire, la red se va formando lentamente como consecuencia de la volatilización del disolvente, que acerca las cadenitas y propicia la formación de enlaces. El calor acelera este proceso, por eso a menudo se usan secadores con aire caliente. La radiación ultravioleta lo acelera mucho más porque activa los fotoiniciadores, que vienen a ser como unos eslabones sueltos de las cadenitas (radicales libres) que crean rápidamente muchos puntos de enlace.