Jair Bolsonaro

Lo decidió el juez Alexandre de Moraes. El expresidente brasilero deberá usar una tobillera electrónica y no podrá recibir visitas.

El Supremo Tribunal Federal de Brasil ordenó que el expresidente Jair Bolsonaro cumpla arresto domiciliario con tobillera electrónica, al igual que la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner. Está acusado de planear un intento de golpe de Estado en 2022 y tiene prohibido usar redes sociales, ver a su hijo Eduardo y acercarse a embajadas.

El expresidente está imputado junto con varios de sus asesores de su Gobierno por los hechos relativos al 8 de enero de 2023, a una semana de la asunción de Lula al poder.

El expresidente brasileño estuvo internado durante tres semanas y fue intervenido por una grave obstrucción intestinal. "Vuelvo a casa renovado", expresó.

Previo a la cumbre de la ultraderecha latinoamericana, el jefe de Estado argentino se reunió con el expresidente brasileño; vieron juntos el partido entre el país vecino y Uruguay por los cuartos de final

La visita del Presidente se da tras su tenso cruce con el mandatario brasileño Lula da Silva. Partirá hacia Camboriú la noche del sábado y regresará el domingo.

El expresidente brasileño Jair Bolsonaro es citado por la Policía Federal en relación con una investigación sobre planes golpistas para evitar la asunción de su sucesor, Luiz Inácio Lula da Silva.

El expresidente brasileño, Jair Bolsonaro, llama a sus seguidores a manifestarse en la Avenida Paulista, São Paulo, en respuesta a las acusaciones de conspirar para evitar la asunción de Lula da Silva. La convocatoria surge luego de que le confiscaran el pasaporte y se intensificaran las investigaciones.

"Quiero defenderme de todas las acusaciones que me han realizado en los últimos meses", dijo el exmandatario al convocar a movilizarse el domingo 25 de febrero en la principal avenida paulista.

Valdemar Costa Neto, presidente del Partido Liberal, la principal fuerza opositora en Brasil, ha sido detenido por portación ilegal de armamento en una operación policial encabezada por el juez Alexandre de Moraes. La investigación apunta a su presunta participación en planes golpistas vinculados al círculo de civiles y militares aliados de Jair Bolsonaro en 2022.